La historia de Las Viandas

El restaurante Las Viandas tiene una larga historia a sus espaldas. Fundado en 1993 por Diosdado Martín, un hombre con un gran bagaje en el mundo de la hostelería, siempre se ha distinguido por la calidad de los productos que ofrece.

La trayectoria del patriarca es larga y muy interesante. Tras salir de su casa en un pueblecito de Ávila, comenzó su aprendizaje en el Hotel Castellana Intercontinental. Tras esta experiencia continuo su formación en distintos restaurantes de San Lorenzo de El Escorial como “Pimentel” o “Mont Blanc”.

A los 22 años le surgió la oportunidad de trabajar en Valencia, en concreto a Gandía, para dirigir el “Club de Tenis”. Dos años después Diosdado volvió a la Comunidad de Madrid, a Móstoles, donde montó una pequeña bodega que también servía diversas tapas. Esta bodega se quedó pequeña, así que tuvo que crear otro pequeño restaurante, también en Móstoles más amplio que el anterior.

Ya en el año 1986 dio el salto a Madrid capital, en donde inauguró un restaurante de dos plantas junto a la calle Alcalá. Al cabo de tres años surgió otra mudanza a San Lorenzo de El Escorial donde creó la Marisquería “As-Burgas”, con tal éxito de clientes que en poco tiempo pudo comprar otro local más amplio en el corazón de San Lorenzo de El Escorial, en la plaza de su ayuntamiento. Este fue el embrión de lo que hoy conocemos como Las Viandas.

En un primer momento, Las Viandas solo ocupaba la planta baja del edificio en el que está alojado. En los primeros años de la década de los 2000 abrieron una segunda planta que dio mucha más capacidad al negocio.

Desde 2017, las riendas del restaurante las llevan Mónica, hija de Diosdado, y Sergio, su marido. Ellos se han encargado de dar un vuelta a todo. Poco después del confinamiento, tiempo en el que no dejaron de ofrecer sus servicios a domicilio, emprendieron una ambiciosa reforma que les llevo a crear en la segunda planta del restaurante, El Jardín de Las Viandas.  En este espacio volcaron todas sus ilusiones y su manera de ver las cosas. Y en el siguen, conjugando el legado de Diosdado con las nuevas corrientes que van llegando.